La valentía de una corredora rarámuri en el Ultramaratón de Hong Kong

Queridos míos, hoy les quiero contar una historia que me llena el corazón de orgullo y admiración. Se trata de María Lorena Ramírez Nahueachi, una joven corredora rarámuri que, con su esfuerzo y determinación, nos ha dado una gran lección de vida.

María Lorena participó en el Ultramaratón de Hong Kong, una prueba que no es para cualquiera, pues consiste en recorrer 100 kilómetros por diferentes lugares de ese país. Imagínense, cien kilómetros, casi como ir de aquí al pueblo vecino y regresar, pero corriendo. Y ella lo hizo, con un tiempo de 26 horas, 2 minutos y 12 segundos. ¡Qué valentía!

Lo más hermoso es que María Lorena no corrió solo por ella, sino que llevó consigo el nombre de México y la vestimenta típica de su región. Con sus huaraches y su traje tradicional, demostró que las raíces y la identidad son un tesoro que nunca debemos dejar atrás. Aunque no fue fácil, porque en el kilómetro 70, sus pies comenzaron a resentir el cansancio y las lesiones. Pero, como dicen por ahí, “el que persevera, alcanza”.

Con el apoyo de los equipos médicos y su propio coraje, siguió adelante, escalando posiciones y dejando atrás las dificultades. Al final, cruzó la meta en el Rotary Club Park, donde fue recibida con aplausos y respeto por todos los presentes.

Esta historia, queridos míos, nos enseña que la vida es como una carrera larga. A veces el camino se pone difícil, los pies nos duelen y las fuerzas parecen abandonarnos. Pero si seguimos adelante, con paciencia y determinación, siempre llegaremos a la meta. Y no importa si no somos los primeros, lo importante es llegar con el corazón lleno de orgullo y la frente en alto.

Así que, cuando sientan que el camino es cuesta arriba, recuerden a María Lorena y su ejemplo. Porque, como dice mi abuelita, “la vida no es una carrera corta, sino un maratón que se gana con constancia y amor por lo que hacemos”.

Un abrazo fuerte, y no olviden tomarse un cafecito caliente mientras reflexionan sobre estas palabras. La vida es bella, aunque a veces nos ponga a prueba.