El uso de inteligencia artificial en El Brutalista genera debate en Hollywood

La película *El Brutalista*, considerada una de las favoritas para los premios Óscar, se encuentra bajo escrutinio público tras revelarse el uso de herramientas de inteligencia artificial (IA) en la edición de diálogos en húngaro, interpretados por los actores Adrien Brody y Felicity Jones. Este hecho ha generado un intenso debate en la industria cinematográfica, especialmente en Hollywood, donde la aplicación de tecnologías emergentes en el cine sigue siendo un tema controvertido.

Dávid Jancsó, editor de la película, explicó en una entrevista con la revista *Red Shark News* que el uso de IA fue necesario para perfeccionar la pronunciación de los diálogos en húngaro, un idioma conocido por su complejidad fonética. “Soy hablante nativo de húngaro y sé que es uno de los idiomas más difíciles de aprender a pronunciar”, señaló Jancsó. Aunque los actores realizaron un trabajo excepcional, el equipo de producción buscó garantizar que ni siquiera los hablantes nativos pudieran detectar inconsistencias en la pronunciación.

Para lograrlo, se empleó la tecnología de la empresa ucraniana Respeecher, especializada en la manipulación de audio mediante IA. Esta herramienta se utilizó en el proceso conocido como ADR (Automated Dialogue Replacement), que consiste en reemplazar diálogos grabados durante el rodaje con nuevas grabaciones. Jancsó detalló que, inicialmente, se intentó realizar el ADR con los actores principales, pero ciertos sonidos resultaron particularmente desafiantes. Posteriormente, se exploró la opción de grabar con otros actores, pero esta alternativa no fue efectiva. Finalmente, se optó por la IA para agilizar el proceso y mantener la autenticidad de las actuaciones.

Además de su aplicación en el diálogo, la producción de *El Brutalista* también utilizó IA para crear una serie de dibujos arquitectónicos en una secuencia final de la película. Sin embargo, el director Brady Corbet aclaró que estas imágenes no fueron generadas completamente por IA, sino que fueron diseñadas manualmente por artistas, con la intención de imitar el estilo visual de representaciones digitales de la década de 1980.

El uso de IA en la película ha generado críticas en redes sociales, donde algunos detractores argumentan que esta tecnología podría haber afectado la calidad de las actuaciones de Brody y Jones. No obstante, Corbet defendió el proceso, afirmando que las interpretaciones de los actores son completamente auténticas y que la IA se utilizó únicamente para refinar detalles específicos en la pronunciación del húngaro. “Las actuaciones de Adrien y Felicity son completamente de ellos. Trabajaron durante meses con la entrenadora de dialecto Tanera Marshall para perfeccionar sus acentos”, explicó el director a *Deadline*.

Este caso ha reavivado el debate sobre el papel de la IA en la industria cinematográfica. Mientras algunos ven estas herramientas como una forma de optimizar procesos y superar limitaciones técnicas, otros las perciben como una amenaza para la autenticidad y el arte tradicional. *El Brutalista*, que aspira a varios premios BAFTA y Critics’ Choice Awards, se ha convertido en un ejemplo emblemático de cómo la tecnología está transformando el cine, desafiando las fronteras entre la innovación y la tradición.

En conclusión, el uso de IA en *El Brutalista* no solo ha permitido superar barreras técnicas, sino que también ha puesto en evidencia la necesidad de un diálogo abierto y riguroso sobre el futuro de la producción cinematográfica. A medida que la industria continúa evolucionando, es fundamental encontrar un equilibrio entre la eficiencia tecnológica y la preservación del arte humano.