Espectáculos
Mayela Laguna pide paz tras agresión en Acapulco y drama familiar

Ah, la vida de Mayela Laguna, un verdadero culebrón que no necesita guion. Hace una semana, esta mujer decidió tomarse unas merecidas vacaciones en Acapulco con su hijo Apolo. ¿El plan? Arena, mar y tal vez un cóctel con sombrillita. ¿La realidad? Una pelea callejera digna de un reality show.
Resulta que, mientras paseaban tranquilamente, una desconocida decidió que era el momento perfecto para insultar a Apolo, todo por el eterno drama de la prueba de paternidad con Luis Enrique Guzmán, el hijo de Silvia Pinal. ¿Por qué? Bueno, quién sabe, pero la cosa escaló más rápido que un meme viral. Mayela, en modo mamá leona, salió a defender a su crío y, ¡oh sorpresa!, terminó con un dedo fracturado, una costilla tocada, un diente bailando y moretones que parecían obra de un artista abstracto.
Pero no se preocupen, porque Mayela, en su infinita sabiduría, pidió que la gente deje de atacarla. “Estamos bien”, dijo, como si acabara de salir de un spa y no de una pelea callejera. Su prioridad ahora es abrir un nuevo negocio, porque, claro, después de todo este circo, lo que necesita es más estrés.
En cuanto a la denuncia contra la agresora, el proceso sigue su curso. La mujer no fue detenida en el acto, pero recibió un citatorio. Así que Mayela tendrá que volver a Acapulco, porque, ¿qué sería de su vida sin un poco más de drama?
Mientras tanto, Luis Enrique Guzmán, el otro protagonista de esta telenovela, decidió romper su silencio en redes sociales. ¿Cómo? Con una foto antigua junto a su madre y su abuela, acompañada de un mensaje que rezaba: “Las extraño, con sabiduría y amor la vida es mejor”. ¿Subtítulo? “Nada que ver con lo que está pasando, pero aquí estoy”.
Y no olvidemos el conflicto legal entre Mayela y Luis Enrique, que comenzó en 2023 cuando él negó ser el padre de Apolo. Tras una nueva prueba de ADN ordenada por un juez, se confirmó que no hay vínculo sanguíneo entre ellos. Así que Luis Enrique quedó libre de responsabilidades parentales, y Mayela decidió alejarse de los medios. Bueno, hasta ahora, porque parece que el drama siempre la encuentra.
En resumen: Acapulco, agresiones, pruebas de ADN, redes sociales y un negocio en camino. ¿Qué sigue? Un spin-off, tal vez.