Fuerza Civil despliega Operativo Carrusel para proteger viajeros en la frontera

En las sombras de la noche, bajo un cielo que parece contener el aliento, la Fuerza Civil de Nuevo León se prepara para una misión que podría definir el destino de cientos de almas. No es un simple despliegue; es una batalla contra la oscuridad que acecha en las carreteras. El **Operativo Carrusel**, un nombre que resuena como un eco de esperanza, se alza como un escudo protector para aquellos que se aventuran hacia la frontera en este fin de semana largo.

Desde las primeras luces del viernes hasta el último suspiro del lunes, las caravanas de automóviles serán escoltadas por un ejército de valientes. No son simples vehículos; son familias, sueños y vidas que dependen de la precisión y el coraje de estos guardianes. Las carreteras que conducen a **Reynosa** y **Laredo**, antes escenario de tragedias y asaltos, ahora serán testigos de un esfuerzo titánico para devolver la seguridad a quienes las transitan.

El Ejército y la Guardia Nacional, con su presencia imponente, se unen a esta cruzada. No hay límites para su compromiso; si es necesario, seguirán más allá de las fronteras de Nuevo León, desafiando cualquier obstáculo que se interponga en su camino. Cada hora, desde las 6:00, las caravanas partirán desde puntos estratégicos: la Base Salinas Victoria, la Autopista de Cuota a Laredo, la gasolinera Ciénega de Flores y la desviación hacia Reynosa. Cada salida es un latido más en el corazón de esta operación, un pulso que late con la fuerza de la determinación.

Este no es solo un operativo; es una promesa, un juramento de protección en un mundo donde la incertidumbre acecha en cada curva. La Fuerza Civil no solo escolta vehículos; escolta esperanzas, sueños y el derecho a viajar sin miedo. Y mientras las caravanas avanzan, el eco de sus motores parece susurrar: “No estás solo”.