Nacional
Impacto de los aranceles en la industria del autotransporte y las exportaciones mexicanas

La aplicación de aranceles del 25% por parte de Estados Unidos a productos mexicanos, aunque pospuesta, ha generado un clima de incertidumbre que afecta significativamente los movimientos de carga en la frontera. Según Manuel Sotelo, vicepresidente de la Región Norte de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), el aplazamiento de los aranceles por un mes no ha resuelto la situación, sino que ha prolongado la incertidumbre en el sector.
Sotelo destacó que la amenaza arancelaria sigue latente, lo que podría impulsar a industrias como la manufacturera a incrementar sus exportaciones hacia Estados Unidos como medida preventiva. Un ejemplo de este fenómeno se observó el 31 de enero en la frontera de Ciudad Juárez, donde los niveles de exportación aumentaron entre un 20% y un 30% en comparación con los registros habituales. Este punto fronterizo representa el 70% de las exportaciones de la industria manufacturera de Chihuahua, lo que subraya su importancia estratégica.
El vicepresidente de Canacar señaló que este comportamiento podría repetirse en los próximos 30 días, lo que refleja la preocupación del sector por los posibles efectos de los aranceles. Además, Sotelo consideró que el acuerdo entre México y Estados Unidos no aborda de manera efectiva los temas de migración y seguridad, lo que añade otra capa de complejidad a la situación.
Por su parte, Israel Delgado, vicepresidente de la región noroeste de Canacar, coincidió en que los exportadores están incrementando sus volúmenes de carga para cumplir con sus compromisos comerciales. Delgado destacó que, al no encontrarse en temporada pico, el sector del transporte tiene la capacidad de absorber la demanda adicional sin necesidad de aumentar las tarifas. “Generalmente, en el primer trimestre del año, estamos un 30% por debajo de la capacidad de demanda, lo que permite a las aduanas manejar este impacto sin mayores complicaciones”, explicó.
En conclusión, la incertidumbre generada por los aranceles ha tenido un efecto inmediato en las dinámicas comerciales entre México y Estados Unidos, particularmente en la industria del autotransporte y las exportaciones manufactureras. Aunque el sector ha demostrado capacidad de adaptación, la falta de una solución definitiva a los temas migratorios y de seguridad podría prolongar los desafíos en el corto y mediano plazo.