Espectáculos
Anitta pierde la paciencia por fallas de audio en su concierto

La diva brasileña Anitta, la reina de los bops y los looks que nos hacen cuestionar nuestro guardarropa, se convirtió en *trending topic* gracias a un video que captó su momento de “ya no puedo con esto”. Durante su más reciente show en Belo Horizonte, Brasil, donde miles de fans fueron a verla (y probablemente a grabar todo para TikTok), los problemas técnicos decidieron robarle el protagonismo.
Imagínense: Anitta, luciendo un traje verde lleno de lentejuelas que brillaban más que nuestras esperanzas de un lunes productivo, intenta cantar, pero el micrófono decide que no. Nada. Silencio. Como cuando intentas hablar en una videollamada y te das cuenta de que estás en mute. La cantante, con una paciencia digna de un santo (al principio), le pasa el micrófono a su equipo para que lo revisen. Spoiler: no funcionó. Ni la primera, ni la segunda, ni la tercera, ni la cuarta vez. Sí, cuatro micrófonos fallidos. ¿Quién está a cargo del audio? ¿Un pasante en su primer día?
En un momento de puro caos, Anitta voltea los ojos como si estuviera en un reality show y hace el gesto de lanzar el micrófono. No lo hizo, pero el meme potencial ahí estaba. Finalmente, encontró un micrófono que sí funcionaba, pero el daño ya estaba hecho: la cantante estaba más frustrada que nosotros cuando se nos cae el Wi-Fi en medio de un maratón de Netflix.
A pesar de todo, intentó mantener el ánimo del público con aplausos y sonrisas forzadas, porque, al final, el show debe continuar. Pero, claro, TikTok no perdona. Los comentarios se dividieron entre quienes la defendían (“¿Cómo no se va a enojar con cuatro micrófonos malos?”) y quienes criticaban su actitud (“Si así trata a su equipo, no quiero saber cómo trata a los repartidores de comida”).
Anitta, por su parte, no ha dicho ni pío sobre el tema. Probablemente está demasiado ocupada buscando un técnico de sonido que no le falle en el próximo concierto. O tal vez está planeando su próximo outfit, porque, seamos honestos, ese traje verde era *todo un mood*.