Renata Zarazúa hace historia en el Abierto de Australia con victoria épica

Ahí va Renata Zarazúa, la tenista mexicana que está rompiendo récords y dejando a medio mundo con la boca abierta. ¿Qué hizo? Nada más y nada menos que avanzar a la segunda ronda del Abierto de Australia después de un partidazo contra Taylor Townsend. Sí, esa Townsend que, aunque no es Serena Williams, tampoco es cualquier cosa. El marcador final: 6-7 (6), 6-1 y 6-2. O sea, Zarazúa perdió el primer set en un tie-break que nos tuvo al borde del infarto, pero luego se puso las pilas y arrasó. ¿Qué tal?

Pero esperen, esto no es solo una victoria cualquiera. Es HISTORIA. La última vez que una mexicana ganó un partido en el cuadro principal del Abierto de Australia fue hace 25 años, cuando Angélica Gavaldón lo hizo en el 2000. Y si hablamos de los hombres, Leonardo Lavalle fue el último en lograrlo en 1990. O sea, Zarazúa está rompiendo una maldición de décadas. ¿Alguien dijo “presión”?

La cosa es que Renata no solo ganó, sino que lo hizo con estilo. Después de ese primer set que nos dejó a todos mordiéndonos las uñas, se levantó como si nada y dominó el partido. Sus servicios fueron tan consistentes que Townsend no supo qué hacer. La estadounidense cometió 5 dobles faltas en el segundo set y 16 errores no forzados. ¿Qué hizo Zarazúa? Aprovechó y le dio una clase magistral de tenis.

Y no podemos olvidar a la afición, que estaba ahí, gritando “¡México, México!” y cantando el “Cielito Lindo” como si fuera un partido de la selección. ¿Qué más quieren? Ahora, Renata (que está en el puesto 70 del ranking) se enfrentará a Jasmine Paolini (10), la italiana que acaba de pasar por encima de Wei Sijia con un doble 6-0 y 6-4. El duelo será este miércoles 15 de enero en Melbourne, y aunque Paolini es favorita, ya sabemos que Zarazúa no se achica ante nadie.

Este es el quinto Grand Slam consecutivo de Renata, pero el primero en el cuadro principal. ¿Por qué? Porque está en el Top 70, algo que solo había logrado Angélica Gavaldón hace 30 años. O sea, estamos hablando de una tenista que está escribiendo su nombre en letras grandes en el tenis mexicano. ¿Qué sigue? Pues, a ver si le mete un susto a Paolini y nos da otra sorpresa. ¡Vamos, Renata!