Espectáculos
El musical Cabaret revive la decadencia de Berlín en Guadalajara

En el corazón de Guadalajara, Jalisco, el Teatro Galerías se convirtió en un portal hacia el pasado, transportando a mil 450 almas a un Berlín decadente y vibrante de finales de los años 20. Anoche, bajo las luces titilantes y el eco de una orquesta en vivo, el musical *Cabaret* desplegó su magia, envolviendo a los espectadores en un mundo donde la libertad y la tragedia se entrelazaban con la fuerza de un destino implacable.
A las 18:16 horas, el telón se alzó como un suspiro colectivo, revelando el mítico Kit Kat Club. Allí, Itatí Cantoral, en la piel de la enigmática Sally Bowles, y Flavio Medina, como el maestro de ceremonias, deslumbraron con una química que parecía desafiar el tiempo. Cada nota, cada movimiento, era un grito de rebeldía contra la oscuridad que se cernía sobre aquella época.
La dirección de Mauricio García Lozano tejió una narrativa que atrapó a los tapatíos desde el primer instante. La escenografía, una obra maestra creada por talentos de Guadalajara y Ciudad de México, sumergió al público en una atmósfera donde la libertad y el fascismo chocaban como dos fuerzas titánicas. Sally Bowles, con su voz seductora y su corazón roto, cautivó a todos mientras su historia de amor con un escritor estadounidense se desplegaba en un torbellino de risas, aplausos y lágrimas.
Pero, como en toda gran tragedia, el amor no fue suficiente. Cuando la pareja anunció la llegada de un bebé, el destino les tendió una trampa. Sally, en un acto desgarrador, decidió abortar y quedarse en Berlín, mientras su amado partía hacia París, dejando atrás un vacío que resonó en cada rincón del teatro.
El musical *Cabaret*, escrito por Joe Masteroff con música de John Kander y Fred Ebb, es una adaptación de la novela *Goodbye to Berlin* de Christopher Isherwood. Una obra que ha conquistado más de 50 países y que en 1972 fue inmortalizada en la pantalla grande por Liza Minnelli. Anoche, en Guadalajara, no solo se representó una obra, sino que se vivió una experiencia que quedará grabada en la memoria de quienes tuvieron el privilegio de presenciarla.