Nacional
Reflexiones sobre la importancia de los recursos en las elecciones judiciales

Queridos míos, hoy les quiero compartir una noticia que me hizo reflexionar sobre la importancia de cuidar los detalles en los procesos que construyen nuestra democracia. Resulta que los consejeros del Instituto Nacional Electoral (INE) han pedido a la Presidenta Claudia Sheinbaum que entregue unos 800 millones de pesos para apoyar la elección judicial que se llevará a cabo a finales de este mes.
Uno piensa, ¿por qué tanto dinero? Pero, como siempre les digo, las cosas no son tan simples como parecen. Cada casilla electoral, esos lugares donde ustedes y yo depositamos nuestro voto, tiene un costo. Imagínense, más de 34 mil pesos por cada una. Ahí se incluye desde las mesas y sillas hasta el líquido indeleble que nos marca el dedo, y también el pago de las personas que trabajan para que todo funcione como debe ser.
La Presidenta mencionó que, por ahora, solo hay disponibles 800 millones de pesos, pero los consejeros confían en que, poco a poco, se irán liberando los recursos necesarios. Es como cuando uno cocina un guiso: no se puede echar todo de golpe, hay que ir añadiendo los ingredientes con paciencia y cuidado para que el resultado sea el mejor.
Me llamó la atención cómo la consejera Norma de la Cruz destacó que, con estos recursos, no solo se pagará lo necesario para las casillas, sino que también se financiarán proyectos para informar mejor a la ciudadanía. Eso, queridos míos, es fundamental. Porque, como les digo siempre, una decisión bien informada es una decisión sabia.
Y aunque a veces parezca que las cosas avanzan lentamente, hay que confiar en que, con diálogo y compromiso, se pueden lograr acuerdos que beneficien a todos. Como cuando uno siembra una semilla: no se ve el fruto de inmediato, pero con cuidado y dedicación, al final siempre da sus flores.
Así que, queridos míos, les invito a seguir atentos a estos procesos, a valorar el esfuerzo que implica organizar unas elecciones justas y transparentes, y a recordar que cada voto cuenta. Porque, como les digo siempre, la democracia se construye entre todos, con paciencia, respeto y mucho amor por nuestro país.
Un abrazo fuerte, y recuerden: las cosas importantes toman su tiempo, pero siempre valen la pena.